Las siguientes pautas pueden ayudarte a prevenirla.
Evitar realizar actividades que requieran un esfuerzo excesivo en un solo lado del cuerpo.
- Si llevas bolsos pesados en un solo hombro, asegúrate de alternar los hombros de forma regular. Asimismo, los niños deberían llevar sus mochilas con ambas correas puestas.
- Si practicas un deporte que requiere el uso regular y prolongado de los músculos de un solo lado del cuerpo (como, por ejemplo, lanzar una pelota de béisbol), asegúrate de estirarte bien y ejercitar el otro lado del cuerpo para balancear los músculos.
Ejercitar los músculos de la espalda.
Tener músculos fuertes y estables en la espalda ayuda a prevenir la escoliosis, ya que son estos músculos los que sirven de soporte para la columna vertebral y la mantienen alineada. Algunos ejercicios para fortalecer la espalda incluyen:
- Estiramiento de la espalda. Recuéstate boca abajo sobre una pelota de gimnasia con las rodillas en el suelo y el peso centrado en la pelvis. Deja caer la parte superior del tronco hacia el suelo y luego levántala, de modo que sientas que los músculos de la espalda baja se flexionan para soportar el peso. Permanece en esa posición durante 5 segundos y repite el ejercicio 10 veces.
- Remos. Siéntate en un banco, un banco de ejercicios o una pelota de gimnasia. Inclínate hacia adelante hasta que tu pecho toque tus muslos. Empieza con los brazos completamente estirados en dirección hacia el suelo. Carga un peso liviano en cada mano y dobla los brazos, elevando los codos en dirección hacia el techo, como si estuvieras tratando de encender una máquina podadora. Luego, retorna tus brazos a su posición inicial. Haz 3 series de 15.
- Estiramiento de piernas y brazos. Recuéstate boca abajo sobre una pelota de gimnasia, centrando el peso en tu pelvis. Extiende tus piernas hacia atrás y deja reposar los dedos de tus pies sobre el suelo. Estira tus brazos hacia adelante. Alterna los lados al levantar la pierna derecha del suelo y levantar el brazo izquierdo. Luego, levanta la pierna izquierda del suelo y levanta el brazo derecho. Haz 3 series de 15.
Mejorar la postura.
Enfócate en sentarte derecho y caminar con la cabeza erguida y los hombros hacia atrás.
Consumir vitaminas y minerales apropiados.
El calcio contribuye a mantener los huesos saludables. Consumir alimentos como avena, soya, almendras e incluso sardinas te ayudará a mantener tus huesos fuertes y estables.
Es recomendable consumir alimentos que contengan vitamina D, la cual es crucial para la absorción de calcio en el cuerpo.